Emociones fuertes, coros cerebrales
Si alguien sonríe, ¿sonríes? Emociones como la felicidad, la
tristeza o la rabia pueden contagiarse. Otros ejemplos sería cuando un equipo
deportivo pasa su excitación y alegría a los espectadores durante un juego
decisivo. Este comportamiento podría haber desempeñado un papel importante en
nuestro desarrollo como especie, ya que compartir los estados emocionales de
otros puede facilitar la comprensión de sus intenciones y acciones.
Muchos científicos han tratado de entender cómo y por qué
las emociones hacen que funcionemos como una unidad, independientemente de
cuántos individuos nos encontremos reunidos. En un estudio reciente, realizado
por científicos finlandeses, un grupo de personas presenciaron una película, y
se evaluó su actividad cerebral ante emociones positivas, negativas y neutras.
Se encontró que las emociones fuertes tienden a hacer que
las mentes trabajen al unísono, es decir que la actividad cerebral tiende a
sincronizarse al momento en que están expuestos a emociones. Al compartir un
estado emocional común, se “sintoniza” respuestas cerebrales específicas entre
los individuos de un grupo para experimentar percepciones, y predicciones del
mundo similares; facilitando así la interacción social.
Entonces cada uno de nosotros podríamos tener una actividad
cerebral muy diferente, pero cuando se introduce una emoción fuerte en un
grupo, la tendencia será sentir y pensar al unísono. Más que un coro cerebral,
esto implica que al compartir estados
emocionales de otros podremos interpretar sus acciones y de alguna manera
predecir su comportamiento.
A través de este tipo de simulación común de la mente,
podemos estimar con más precisión las metas y las necesidades de los demás y
así ajustar nuestra propia conducta en consecuencia, facilitando así la interacción
y coherencia social, entre otros procesos de grupo.
Los resultados de esta investigación tienen implicaciones
importantes para profundizar nuestra comprensión de los trastornos mentales
relacionados con el procesamiento socio-emocional anormal.